Ya estamos en China uffff, 24 grados pero mucha humedad mucha contaminación que ellos llaman niebla, mucha gente por la calle, mucha bicicleta, el trayecto es eterno, una guía que apenas habla español nos acompaña a un minimicro que será nuestro vehículo en este viaje, en cada ciudad uno pero todos mas o menos igual, mas o menos cutres o limpios pero de dimensiones parecidas.
Somos 11 en total, 2 parejas, 2 chicas solas que vienen con una de las parejas y 3 señoras mayores muy muy habladoras y pesadas desde el primer momento. Montamos en el micro y al hotel Superhouse Internacional, está de lujo, las habitaciones alucinantes grandísimas camas enormes y comodísimas, el baño tiene una cortina que si abres se ve desde la habitación, tenemos que hacer un esfuerzo por no meternos en ellas a dormir, nos duchamos y ponemos ropa limpia y nos vamos con una de las parejas al mercado de la seda, cogemos un taxi en la puerta del hotel vemos que baja la bandera (nos han dicho que nos fijemos en eso para que no nos timen) ya hemos cambiado dólares a yuanes en el hotel, en recepción te cambian en todos y al precio estipulado.
Al llegar al mercado nos vamos por nuestra cuenta, yo estoy realmente cansada voy como drogada y no quiero comprar nada pq no veo, pero Fonzo esta perfectamente y se lo quiere comprar todo, este mercado es impresionante, hay falsificaciones perfectas de todo tipo, son como 7 plantas con tiendecitas muy pequeñas, no te dejan ni andar pq tiran de ti diciendo “balato, balato” para que vayas a su tienda, yo veo cosas entre sueños pero ya vendremos otro día. Resultado final Fonzo se gasta 1700 yuanes en Cazadora 650 y , relojes 300 y , camisetas 150 y , mochila 150 y, cartera 80 y, cazadora 150 y, calzoncillos 60 y, camisetas de manga larga150 y , el se ha traído poca ropa para comprársela aquí e ir dejando casi toda la que trae, vamos cargadísimos con un montón de bolsas, nos sentamos en una terraza justo fuera del la tienda y tomamos conciencia de que estamos en China, en Pekín, al otro lado del mundo, nos callamos y observamos, pedimos una cerveza y una coke diet y nos hacemos una foto para ver la cara que tenemos…agotamiento.
Ahora viene la segunda parte, buscar un taxi para volver al hotel, por supuesto imprescindible antes de salir del hotel coger una tarjeta donde viene el nombre en chino pq aquí no habla ingles nadie y es imposible hacerte entender, necesitas mucho tiempo y paciencia, hacemos un par de intentos pero medio Pekín espera taxi en las esquinas así que se me ocurre irnos a la puerta de un hotel a esperar taxi, y eso hacemos, damos una propina al señor que esta en la puerta de unos cuantos yuanes (no muchos para no crear precedente) y cogemos un taxi con taxímetro, nos cobra 24 yuanes (2,4 euros) por llevarnos al hotel a la otra punta de la ciudad, el taxímetro apenas avanza, y son súper honrados, no quieren coger mas que el dinero que marca dejar propina para ellos no es normal…
OJO E IMPORTANTE, EN PEKIN ES MUY DIFICIL COGER TAXI, ESO HAY QUE TENERLO EN CUENTA PQ A NOSOTROS NOS HUBIERA VENIDO MUY BIEN QUE NOS AVISARAN Y NOS DIERAN LA OPCION QUE AL FINAL DESCUBRIMOS NOSOTROS, IR A LA PUERTA DE UN HOTEL
Subimos a la habitación, dejamos las bolsas y nos vamos a cenar a un KFC que esta al lado del hotel. Mañana a las 8 tenemos que estar abajo ya desayunados y preparados para un día duro, quizá por la noche vayamos al mercado de la seda de nuevo, ya veremos.
Las 22 horas, llevamos sin dormir un montón de horas, caeremos rendidos. Zzzzzzzzzzz.
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